No es lo mismo tiempo que clima, de hecho en ocasiones se oyen expresiones como ‘las condiciones climatológicas no permitieron jugar el partido’ o ‘mañana el clima será más suave’. Pero no son expresiones correctas ya que los dos conceptos tienen significados diferentes que conviene manejar bien. No es lo mismo el clima de una región y el tiempo de un día en concreto (en un clima húmedo también hay días calurosos y secos). Cuando hablamos del clima hablamos de las condiciones medias (o extremas) de las variables meteorológicas y de los tipos de tiempo atmosférico que lo caracterizan. Normalmente se han obtenido a partir de series de variables meteorológicas, es decir, datos recogidos a lo largo de un periodo de tiempo largo. Estas series de datos son fundamentales para la investigación científica, especialmente del cambio climático y su conservación y mantenimiento es muy importante. Una de las series más antiguas es la de Barcelona, que se inició en 1786.
Muchas de estas series han llegado a nuestros días gracias a la constancia de las personas que diariamente y manualmente anotaban los datos que recogían las estaciones meteorológicas, ya que antes no eran automáticas.
Página de un Boletín del Observatorio del Ebro dónde se pueden ver las medidas anotadas de distintas variables
El clima mediterráneo es el clima típico de las tierras próximas al mar Mediterráneo aunque no es exclusivo de esta zona. Así pues, se pueden encontrar otras zonas con clima mediterráneo en África, América y Australia. Por ejemplo California tiene un clima similar al de Barcelona.
Barcelona y su clima Mediterráneo
Fuente: US National Park Service California Mediterranean Research Learning Center
El clima mediterráneo se caracteriza, básicamente, por inviernos con temperaturas suaves y veranos cálidos y secos y una pluviometría irregular con un mínimo principal estival. Es decir que en verano llueve poco y en cambio en otoño y primavera llueve más, especialmente en otoño.
En Cataluña, su situación cercana al mar modera la temperatura y al mismo tiempo puede originar lluvias torrenciales en otoño, especialmente en la zona litoral y prelitoral. Hacia el interior del territorio las características térmicas y pluviométricas se modifican, aumenta la amplitud térmica y disminuye la precipitación. Por esta razón en la Depresión Central los inviernos son fríos con muchos días con niebla de inversión térmica, mientras que los veranos son calurosos y secos.
Niebla desde Montserrat
Cómo indicábamos anteriormente, para caracterizar el clima de una región es necesario disponer de series de variables meteorológicas largas (un mínimo de 30 años).
Cuando las series son muy largas permiten, además, identificar si hay ciclos (comportamientos que se repiten periódicamente) o si se encuentran tendencias, es decir, incrementos o disminuciones significativas. En Cataluña se mantienen series muy largas, como la serie de Barcelona (anteriormente nombrada), la del Observatorio del Ebro (cerca de Tortosa) o la del Observatori Fabra (Collserola, Barcelona).